sábado, 17 de septiembre de 2011

Un barullo electoral

Leo que la social-demócrata Helle Thorning-Schmidt, ha vencido en las elecciones danesas, acabando con diez años de gobierno conservador alineado con la ultraderecha y con un discurso que habla de subir impuestos, incrementar el gasto público y humanizar las duras políticas de inmigración impuestas por la derecha. Considerar sanidad, bienestar, educación y seguridad como factores de crecimiento es algo que por estos lares nos puede sonar a chino, habida cuenta de las andanadas contra lo público que vomitan, Feijoo o Fabra y, especialmente Cospedal y Aguirre (por cierto, ¿alguien se ha parado a pensar que entre estos cuatro adalides del recorte, tres ya gobernaban en sus respectivas comunidades autónomas, dos desde hace muchos años, a las que han llevado al desastre económico más absoluto (si es cierta la justificación de su obsesión podadora?).


En junio de 2012 se celebrarán elecciones presidenciales en Francia. Dicen las encuestas que sean quienes sean los candidatos de conservadores y socialistas vencerá Marine Le Pen, la ultraderechista hija de su ultraderechista padre. Aunque no pertenezca al club de fans de Sarcozy (tampoco de Bruni) me parece un cambio peligroso que supone la debacle, de quien preside a los franceseses. El programa de Marine para alejar la crisis de francia, opuesto al que le ha dado el triunfo a Thorning-Schmidt, lo único común, que son mujeres. Me encanta esta variedad de medidas para desatascar esta ponzoña en la que estamos metidos ¿o serán palos de ciego?


Para acabar de enturbiar el panorama francés, antes del verano se celebraron las elecciones cantonales francesas en las que ganaron los socialistas y el personal de la UMP de Sarko cayó estrepitosamente. O los franceses empiezan a estar hartos de Sarkozy o han metido la pata votando a los sociatas o nos equivocamos nosotros queriendo que gobierne Rajoy ¡Quién sabe!


Uno de los Landers más industrializados y poderosos de de Alemania, el de Baden-Wuttemberg (Stutgar), donde la CDU, el partido de Merkel, ha gobernado desde los años 40, ha optado en sus últimas elecciones por un gobierno de coalición entre Verdes y Socialistas, cuya representatividad supera el 39 % obtenido por la CDU. En Renania-Palatinado, otro de los Landers más importantes, gobernarán los socialistas, que han perdido su mayoría absoluta, apoyados por los verdes. A una semana de la publicación de este artículo, actualizo la información: Merkel ha perdido Berlín, y van...


Las encuestas alemanas dicen que si se celebraran elecciones federales hoy sería elegido por primera vez un canciller verde en coalición con el SPD (socialistas), hundido en la condición de socio menor y sin grandes esperanzas de remontar en la segunda mitad que queda de la legislatura. Así que en Alemania apuestan por lo que aquí llamarían algunos izquierda verde, con un programa contrario al de Merkel, desde luego opuesto al de Le Pen y más progresista que el de la danesa Helle Thorning-Schmidt.


Las encuestas italianas dicen que Berlusconi ha tocado fango político, el moral ya lo tocó hace mucho tiempo. Los belgas acaban de llegar a un acuerdo para formar gobierno tras 459 sin rumbo (lo que demuestra que para ir sin rumbo no hace falta gobierno y, a lo peor, para tomar determinados rumbos tampoco)...


Menudo barullo para seguir modelos. Está claro que la única medida que los ciudadanos vemos posible para salir de esta gran estafa en la que andamos metidos es cambiar de gobierno: elegir verdes donde gobernaban conservadores, ultraderechistas donde gobernaban derechistas, socialistas donde había conservadores y populares (al menos eso dicen las encuestas y los hechos de las autonómicas) donde, como en España, había socialistas (salvo en el caso de Aguirre que, pese a sucederse a si misma, parece echar la culpa al gobierno anterior). 




Espero que cambiar a un tipo por otro cada cuatro años (honor que nos permite nuestra democracia) no sea el único recurso para salir del barro. Tampoco espero que tenga razón la pintada del muro.

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